INFARTO CEREBRAL GRAVE COMO COMPLICACION DE LUPUS ERITEMATOSO SISTEMICO

 

FJ Tejada Ruiz, M Robles Marcos, DV Pérez Civantos, M. Zaheri Beryanaki, M Antona Díaz, V Jerez Gómez-Coronado, JA Juliá Narváez.

 

Unidad de Cuidados Intensivos. Hospital Regional Universitario Infanta Cristina. Badajoz

 

 

 

 

DIRECCION PARA CORRESPONDENCIA:

 

Dr. Fco. Javier Tejada Ruiz

Plaza Alfereces nº2, portal 2, 1º G

06005  BADAJOZ

E-mail:   jateru@teleline.es

            fjtr@wanadoo.es

 

 

 

INFARTO CEREBRAL GRAVE COMO COMPLICACION DE LUPUS ERITEMATOSO SISTEMICO

 

 

RESUMEN

 


      


El Lupus Eritematoso Sistémico (LES) es una enfermedad que afecta a muchos órganos y sistemas, en su patogenia están implicados múltiples autoanticuerpos, y   su etiología aún es desconocida. La afectación del Sistema Nervioso es relativamente frecuente, sin encontrarse lesión patognomónica de LES. La cefalea es la afectación más frecuente y el accidente cerebrovascular una de las complicaciones más graves. La afectación cerebral en el LES es multifactorial, jugando un papel importante en las manifestaciones neurológicas del LES los anticuerpos antifosfolípidos


 

Palabras clave: Lupus Eritematoso Sistémico, Sistema Nervioso Central, Accidente Cerebrovascular, Anticuerpos antifosfolípidos.

 

 

INTRODUCCIÓN

 

El Lupus Eritematoso Sistémico es una enfermedad de etiología desconocida que afecta a muchos órganos y sistemas y que se caracteriza por la presencia de múltiples autoanticuerpos que participan en la lesión tisular mediada inmunológicamente. No hay órgano, aparato o sistema que se pueda considerar indemne a esta enfermedad y, cuando se realizan pruebas o estudios especiales, siempre se encuentra que sus manifestaciones subclínicas son mucho más frecuentes de lo esperado. La afectación del Sistema Nervioso en el LES puede traducirse por una amplia gama de manifestaciones, sin que los estudios anatomopatológicos hayan puesto de manifiesto una lesión cerebral capaz de explicar las anomalías neurológicas o una lesión patognomónica de LES. Por otra parte, el accidente cerebrovascular (ACV) constituye una alteración neurológica frecuente, y es sin duda de las complicaciones más graves del LES. Dentro de las manifestaciones neurológicas, la cefalea es la más frecuente. La patogenia de la cefalea en el LES se desconoce, aunque se han postulados varios mecanismos, principalmente la presencia de vasculitis y de anticuerpos antifosfolípidos (AFL).

 

 

CASO CLÍNICO

 

Se trata de una paciente de 33 años de edad con antecedentes de LES, síndrome de anticuerpo antifosfolipídico en tratamiento con corticoides y un episodio previo de trombosis venosa profunda. Comenzó 48 horas antes del ingreso con cefalea que fue aumentando progresivamente. Acudió al Servicio de Urgencias del hospital por reagudización de la cefalea coincidiendo con vómitos y epístaxis. En el estudio inicial la paciente estaba normotensa y sólo destacaba en la analítica una anemia ferropénica. Durante su estancia en planta de hospitalización sufre deterioro brusco del nivel de conciencia hasta 3 puntos en la escala de Glasgow (GCS), realizándose tomografía computarizada (TC) de cráneo urgente donde se apreció hidrocefalia importante, pasando a quirófano donde se insertó una derivación ventriculoperitoneal. La paciente ingresó en la Unidad de Cuidados Intensivos con 3 puntos de GCS y signos clínicos de muerte cerebral, por lo que se repitió un nuevo TC de cráneo donde se observaba resolución de la hidrocefalia y área de posible infarto cerebeloso. Ante la situación clínica y los hallazgos encontrados, se decidió realización de resonancia nuclear magnética (RNM), que confirmó el área isquémica cerebelosa, además de un infarto masivo de troncoencéfalo. La paciente permaneció sin cambios neurológicos siendo exitus a las 72 horas.

 

DISCUSIÓN

 

La cefalea es el síntoma neurológico más frecuente encontrado en el LES, con una prevalencia que oscila entre 10 - 68%, pudiendo ser la manifestación inicial o formando parte  del cortejo sintomático del LES. La cefalea migrañosa y tensional están presentes en una proporción bastante similar 1. La patogenia de la cefalea no es conocida, aunque se han postulado varios mecanismos, entre los que se encuentran las vasculitis, en forma de arteritis de pequeño vaso inducida por inmunocomplejos y la presencia de anticuerpos anticardiolipina que reaccionarían contra los fosfolípidos de la membrana plaquetar, produciéndose liberación de sustancias vasoactivas. En ocasiones la cefalea es secundaria a otros procesos, tales como hematomas subdurales, meningitis aséptica, pseudotumor cerebral, trombosis venosa cerebral o hidrocefalia hipertensiva 2.

Los AFL se asocian a un síndrome clínico de trombosis vasculares, trombocitopenia, abortos de repetición y livedo reticularis en presencia o no de un diagnóstico clínico de LES coexistente. La afectación cerebral en el LES es multifactorial, trombosis de repetición, anticuerpos antineurona, hipertensión, infección asociada, efectos adversos de fármacos, etc. Los AFL pueden jugar un papel importante en las manifestaciones neurológicas del LES. En ausencia de LES, diferentes síntomas neurológicos están bien asociados con AFL, incluyendo ictus, convulsiones, demencia, migraña, isquemia ocular, corea, mielopatia transversa y flebitis cerebral. Otras asociaciones son más controvertidas, como el síndrome de Guillain Barré, la enfermedad de la motoneurona y la hidrocefalia hipertensiva. En todo paciente con AFL y afectación neurológica, debe realizarse una RNM, recomendándose también una ecocardiografía que descarte una posible asociación con una endocarditis de Libman Sacks, una disfunción valvular o trombo cardíaco causante de isquemia cerebral 3.

El ACV es una alteración neurológica frecuente y sin duda de las complicaciones más graves del LES. La clínica dependerá del territorio afecto, y quizás el único dato clínico distintivo respecto a ACV de otras etiologías  es la posibilidad de afectación simultánea de varios territorios vasculares. Es difícil determinar el porcentaje de pacientes con LES que sufrirán ACV durante su evolución. Las series más recientes encuentran prevalencias que varían entre 5,6 y 15%. Entre los mecanismos del ACV se encuentran las vasculitis, la trombosis venosa cerebral, la hemorragia cerebral  (a menudo asociada a hipertensión arterial o trombocitopenia) y el infarto cerebral. Este último es el más frecuente, encontrándose en la mayoría de los estudios clínico-patológicos múltiples   oclusiones   vasculares   que   ocasionan   infartos    de    pequeño   y   gran calibre.

Los AFL se han considerado como el factor principal causante de ictus en los pacientes con LES. Su presencia puede dar lugar tanto a infartos cerebrales como ataques isquémicos transitorios, que suelen ser recurrentes 2.

Por último, se han descrito casos de hidrocefalia normotensiva en relación con el LES, mejorando el cuadro con tratamiento corticoideo y shunt ventriculo-peritoneal 4, y casos de pseudotumor cerebri o hipertensión intracraneal benigna e hidrocefalia hipertensiva. Las causas implicadas han sido estenosis del acueducto de Silvio secundaria a lesiones inflamatorias de neurolupus 5 y mecanismos inmunológicos que alterarían la permeabilidad vascular o producirían un trastorno de la reabsorción del líquido cefalorraquídeo, con el consiguiente aumento de la presión intracraneal 6

En nuestro caso, la paciente debutó con cefalea  y posteriormente desarrolló un ACV isquémico en dos territorios distintos, destacando el infarto masivo de troncoencéfalo, causante de la mala evolución de la paciente. En este caso, la  hidrocefalia sería de origen obstructiva a nivel del territorio infartado.

En resumen: Ante cualquier afectación neurológica inexplicable, incluyendo el pseudotumor cerebri o hidrocefalia, siempre debe de considerarse en el diagnóstico diferencial, la posibilidad de LES y/o síndrome de AFL.  Este caso pone de manifiesto la importancia de realizar una completa evaluación neurológica en todo paciente con LES, AFL y cualquier afectación del Sistema Nervioso Central.

 

 

BIBLIOGRAFIA

 

1.    Markus HS, Hopkinson N. Migraine and headache in systemic lupus erythematosus and their relationship with antibodies against phospholipids. J Neurol 1992; 239: 39-42.

2.    Comabella M, Tintoré M, Montalban X. Manifestaciones neuropsiquiátricas. En: J. Font, M. Khamashta y M. Vilardell eds. Lupus Eritematoso Sistémico. Ed. mra S.L. Barcelona 1996: 157-182.

3.    Hachulla E, Leys D, Deleume JF, Pruvo JP, Devulder B. Neurologic manifestations associated with antiphospholipid antibodies. Or what remains of neurolupus? Rev Med Interne 1995; 16 (2): 121-130.

4.    Uhl MD, Werner BE, Romano TJ, Zidar BL. Normal pressure hydrocephalus in a patient with systemic lupus erythematosus. J Reumatol 1990; 17: 1689-1691.

5.    Borenstein DG, Jacobs RP.  Aqueductal stenosis: a possible late sequela of nervous system inflammation in systemic lupus. South Med J 1982; 75: 475-477.

6.    Mortifee PR, Bedd RA, Stein H. Communicating hydrocephalus in systemic lupus erythematosus with antiphospholipid antibody syndrome. J Rheumatol 1992; 19: 1299-1302.