INTOXICACIÓN SUBAGUDA POR LITIO. A PROPÓSITO DE DOS CASOS.

E. Hernández García, C. Medina Campillo, Ana Mª Melendre Rivas, F. Sousa Pérez, M. Salva Llompart, A. Acebal Botín, J.M.Monfá Bosch.

Sección de Nefrología. Hospital Río Carrión. Palencia. ESPAÑA
ehernández@hrcr.insalud.es


INTRODUCCIÓN

El Carbonato de litio es un psicofármaco utilizado para el tratamiento de la manía y la prevención de la recurrencia de crisis maniacodepresivas. La dosis terapéutica diaria se elimina por los riñones y menos del 5 % por el sudor y las heces. Los dos factores con mayor influencia en el aclaración de litio son el filtrado glomerular y las variaciones de la reabsorción tubular de sodio y agua.

Las manifestaciones clínicas de toxicidad son: Hiperirritabilidad neuromuscular, confusión, delirio, hiperpirexia, estupor, coma, náuseas y vómitos, arritmias cardiacas, hipotensión y colapso circulatorio. El diagnóstico se basa en la clínica y el hallazgo de una litemia mayor de 1.2 mEq/l.

En función de la clínica y los niveles de litemia el tratamiento consistirá en la Suspensión del fármaco y repleción de volumen o bien diálisis.


CASOS CLÍNICOS

Nº 1. Mujer de 58 años de edad con trastono bipolar de 25 años de evolución en tratamiento con litio, con múltiples ingresos por episodios hipertímicos, detectando niveles normales de litemia. Ingresa por cuadro de mutismo, negación a la ingesta e hipertensión arterial introduciendo un IECA. A la semana la paciente presenta fiebre, estupor, insuficiencia renal prerrenal y niveles de litio de 2.7 mmol/l. Tras la suspensión del carbonato de litio y repleción hídrica la paciente mejora clínicamente alcanzando litemias de 0.67 mmol/l.

Nº 2. Mujer de 64 años con esquizofrenia paranoide en tratamiento con litio desde hace 35 años. Ingresa por deterioro progresivo del nivel de conciencia y ausencia de ingesta hasta llegar a situación de coma. Sus niveles de litio son 3.5 mmol/l. Se realizan dos sesiones de hemodiálisis alcanzando cifras de litemia de 0.5 mmol/l.


CONCLUSIONES

1. La intoxicación por litio es más grave en los enfermos tratados crónicamente (tipo subagudo) con este catión.

2. En la intoxicación subaguda o crónica, los niveles de litio superiores a 1.5 mmol/l son tóxicos, sobre todo si existe disminución del filtrado glomerular o un aumento de la reabsorción tubular de sodio.

3. Existe un efecto adverso entre el litio y los IECAS, llevando a la insuficiencia renal que puede asociarse con toxicidad acumulada de litio.