La linfadenitis histiocítica necrotizante de Kikuchi-Fujimoto (1) es una entidad benigna, autolimitada, poco recidivante, que afecta, sobre todo, a los ganglios linfáticos cervicales en las mujeres jóvenes (2). A pesar de los problemas diagnósticos que puede plantear ( 3, 7), pocas veces aparece referida en la literatura en el área de la cabeza y cuello (4), y aún más raramente asociada a la infección por VIH (5, 6).
Mujer de 34 años ex-ADVP, VIH+, diagnosticada hace unos meses de hepatitis crónica C, tuberculosis ganglionar y neumonía por Pneumocystis Carinii. Ingresó en nuestro Centro por un cuadro febril de varias semanas de evolución con sudoración, astenia, dolor abdominal y pérdida de 10 kg de peso. A la exploración se apreciaron candidiasis orofaringea, adenopatias laterocervicales y axilares no dolorosas bilaterales y hepatomegalia. La radiografía del torax mostró adenopatias paratraqueales y en ambos hilios pulmonares. La analítica reveló linfopenia, cociente CD4/CD8: 0,3 y aumento de las enzimas hepáticas. Las técnicas para la identificación de micobacterias, virus, protozoos y hongos resultaron negativas. Ante la persistencia del cuadro febril se biopsió una adenopatia cervical. Dos meses después se hallaba asintomática y sin adenopatías.
La adenopatia mostraba focos de necrosis de coagulación corticales y paracorticales con borramiento parcial de la arquitectura ganglionar (Fig 1). Característicamente se asociaba a una marcada cariorresis, sin presencia destacable de polimorfonucleares.(Fig 2). Los focos de necrosis se hallaban rodeados por una proliferación de células blásticas (Fig 3), abundantes histiocitos CD68 positivos a veces de aspecto semilunar, otras con actividad fagocítica (Fig 4) y un número variable de células blásticas T, (CD 3, 43 y 45RO) positivas (Fig 5) y otras CD30 (Fig 6) . Se apreciaron muy escasas células plasmáticas y aislados leucocitos eosinófilos. Las técnicas de Zhiel, PAS, PASD y plata-metenamina fueron negativas.
A pesar de la frecuencia con la que los patólogos recibimos biopsias de ganglios linfáticos de pacientes VIH, se reportan muy pocos casos de linfadenopatia de KiKuchi ( 5, 6, 7). En el contexto de una imagen de necrosis rica en blastos deberíamos tener en cuenta el diagnostico diferencial entre los linfomas y algunas enfermedades infecciosas lo cual es crucial para el tratamiento del paciente. Sin embargo no podemos olvidar la posibilidad diagnóstica de la enfermedad de Kikuchi. Como ha sido previamente mencionado (3), este diagnóstico deberá ser considerado en cualquier ganglio linfático con necrosis con cariorrexis, especialmente, en las mujeres jóvenes con linfadenopatía cervical. Su etiología sigue siendo desconocida. Recientemente (8) se ha comunicado que la necrosis se produce por apoptosis mediada por células citotóxicas T (CD8).