La primera descripción registrada de las interacciones sociales que podría permitir la interconexión de computadores apareció en agosto de 1962, en una serie de notas escritas por J.C.R. Licklider del M.I.T. discutiendo la Galatic Network. Este autor veía un gran conjunto de computadoras interconectadas donde todo el mundo tendría acceso rápido a datos y programas de cualquier otro sitio. Él era el responsable del programa de investigación sobre computadores de la DARPA (Defense Advanced Research Projects Agency, entonces se llamaba solamente ARPA). A partir de estas primeras propuestas teóricas, y el desarrollo técnico correspondiente, comenzaron primero a conectarse computadores individuales, y posteriormente redes completas. Para una ampliación de esta historia, contada por algunos de sus protagonistas, se puede consultar, por ejemplo [BML]
Contra lo que pueda parecer en estos días de fusiones, absorciones y quiebras de negocios basados en Internet, el espíritu de la red siempre fué de cooperación y ayuda. Su propio desarrollo siempre ha estado basado en estándares abiertos, públicamente disponibles y con foros adecuados para discutirlos donde cualquiera podía participar.
Aunque el origen de la red viene de agencias militares de investigación y desarrollo, rápidamente se extendió su uso entre la comunidad científica y académica. De esta forma, se convirtió en un modo natural de difusión del conocimiento e intercambio de información: al principio, mediante el acceso a los computadores de otros centros/investigadores, posteriormente a través del correo electrónico, las listas de correo, y los grupos de noticias. La aparición de la WWW (World Wide Web) revolucionó la forma en que las comunicaciones se producían debido a su facilidad de manejo y a las grandes posibilidades que ofrecía. Todo lo que ha venido en los últimos años, con acceso a la red por parte de un gran número de personas, es conocido por todos.
A lo que en un principio era comunicación basada en contactos interpersonales o entre pequeños grupos (donde la interacción era fundamental), pronto se se añadió la aparición canales de difusión más parecidos a los tradicionales (revistas, libros, ...) donde uno (o unos cuantos) ofrecen información al resto, reproduciendo los patrones de la vida `desconectada'.