Dr. Antonio Núñez Reis
Especialista en Medicina Intensiva. Ingeniero Informático.
Hospital Fundación Alcorcón (Madrid)
Mucho antes de que existiera la Web, el correo electrónico se ha usado como herramienta de comunicación entre usuarios de redes de ordenadores.
Básicamente, el correo electrónico funciona de una manera muy parecida al correo normal. Escribimos un texto, metemos una foto o cualquier otra cosa que queramos en el sobre, y lo echamos al correo en cualquier buzón. Sólo que el papel, el sobre y el buzón son algo diferentes.
El correo electrónico se basa en dos cosas:
2) Un protocolo de comunicación entre dos ordenadores, que en este caso puede ser 'smtp' para enviar correo o 'pop3' para recibirlo, que permite transmitir mensajes a otros usuarios, localizándolos por su dirección de correo.
Por tanto, necesitamos un ordenador conectado a la red (directamente o a través de otros ordenadores) y un programa cliente de correo que nos permita generar nuestros mensajes y recibir y contestar a los que nos envían.
Existen muchos programas clientes de correo, y cabe citar entre ellos a los que acompañan a los navegadores y a los sistemas operativos. Algunos nombres son Eudora, Outlook, Pine y otros.
Básicamente, nuestro programa de correo puede funcionar hasta de tres formas distintas:
Bueno, ahora vamos a ver esto en la práctica.
Para ello abrimos el programa de correo electrónico, indicamos que queremos crear un nuevo mensaje, y tecleamos su contenido.
Como previamente hemos preparado la foto en formato jpeg (un formato gráfico que permite enviar imágenes en forma de fichero sin que ocupen demasiado), no tenemos más que hacer un 'attach' (añadir la imagen al mensaje), y ya tenemos todo preparado.
En el programa de correo aparecen unos campos que debemos rellenar (como si fuera el sobre del mensaje).
Las direcciones de correo tienen dos partes: antes de @ se escribe el nombre del usuario, y después de @ va el nombre del servidor de correo, que identifica al ordenador que transmitirá finalmente el mensaje al receptor.
Al igual que necesitamos saber la dirección de alguien para mandarle una carta, debemos saber su dirección electrónica para mandarle un mensaje de correo electrónico o e-mail.
Como sabemos que los tíos están un poco envidiosos, podemos mandarles también el mensaje a ellos, por ejemplo indicando su dirección en el campo 'Cc:' .
Para que los abuelos sepan de qué va el mensaje al recibirlo, en el campo 'Asunto:' (o 'Subject:' si usamos un programa en inglés) podemos poner "Aquí teneis a vuestro nieto!!".
¿Qué sucede cuando pulsamos el botón de "Enviar mensaje"?.
El servidor se encarga, al igual que hacen los funcionarios de la oficina de correos, de enviar el mensaje a través de otros ordenadores que actúan como oficinas "intermedias", hasta llegar al servidor de correo de los abuelos.
Cuando estos abran su programa de correo, este hará una consulta al servidor y obtendrá el correo electrónico pendiente, y los abuelos podrán ver a su nieto.
El correo electrónico es una herramienta utilísima para muchos aspectos de nuestra actividad diaria.
Además de poder enviar y recibir mensajes con determinadas personas, a través de las llamadas 'listas de distribución', podemos mantenernos al día sobre las noticias que vayan surgiendo o participar en grupos de discusión de determinados temas (algo parecido a lo que son los grupos de noticias, que se explican a continuación).