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Denominamos oxigenoterapia hiperbárica (OHB) [tabla
nº 1:siglas mas frecuentes] aquella modalidad terapéutica
en la que el paciente respira oxígeno al 100% directamente por mascarilla
oronasal, "casco" o capucha o por intubación endotraqueal, a mayor
presión que la atmosférica, lo que va a permitir que la concentración
de oxígeno ([O2]) sea mucho mayor que la habitual (tabla
nº 2).
Esto se consigue mediante la utilización de la cámara
hiperbárica (C.H.) que consiste en un recipiente que puede ser presurizado,
con aire u O2, hasta una presión concreta.
Las C.H. se clasifican en monoplazas (foto
1) si solo tienen capacidad para un paciente y C.H. multiplazas (fotos
2 y 3) con posibilidad
de tratar a más de un paciente. Las primeras son más comunes
en Norteamérica (en 1.996 había operativas 344 entre EE.UU.
y Canada [1]), y las segundas en Europa.
No es OHB la exposición de una parte aislada del cuerpo a O2
al 100% a presión, pues para cumplir la definición de OHB
el O2 debe llegar por via respiratoria.
Independientemente de lo realizado en otras épocas (2)(3),
la edad moderna de la OHB comienza con los trabajos de Boerema (4)
y Brummelkalp (5), ambos en Amsterdam.
En la actualidad existe una serie de patologias (tabla
nº 3)[6]) en las que se ha observado la utilidad del oxígeno
hiperbárico (OHB) en su tratamiento, bien como terapia de primera
elección o coadyuvante con otros medios terapéuticos, y de
las que casi un 50 % están en el ámbito de la Medicina Intensiva
presentando en este capítulo algunas de las mas representativas
de la utilidad del OHB.
En nuestro país, aparte de su utilización en el tratamiento
de los accidentes de buceo, la OHB comenzó a aplicarse durante la
década de los 60, siendo la Unidad de Terapéutica Hiperbárica
del C.R.I.S, en Barcelona, la primera en comenzar esta terapia, contando
en la actualidad con 11 centros hiperbáricos hospitalarios operativos (tabla
nº 4). En nuestra Comunidad existe uno privado en la Clínica
"EL Angel", en Málaga, y una Cámara Hiperbárica, del
Ministerio de Defensa situada en la Unidad de Buceo de la Base Naval de
Puntales, en Cádiz.
Por otra parte y pese a los cursos que se imparten en las Universidades
de Barcelona, Murcia y Alicante, el conocimiento que se tiene de la existencia,
utilización y posibilidades de la Oxigenoterapia Hiperbárica
y de la Medicina Subacuática es escaso lo cual, por otra parte,
es común al resto de paises de nuestro entorno (en un trabajo reciente
[7] realizado en Gran Bretaña de un
cuestionario enviado a médicos titulados en "Accident and Emergency
Medicine" solo un 19% había recibido alguna información en
Medicina Subacuática y Accidentes de Buceo).
Con este capítulo queremos dar a conocer una patología
y una modalidad terapéutica que en muchos casos será la única
posible en evitar el fracaso de nuestra actuación
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