Capítulo 10. 9. Intoxicación por productos de limpieza

12. EFECTOS SISTÉMICOS


La mayoría de los efectos sistémicos que ocurren tras la ingestión de agentes corrosivos son secundarios a circuntacias locales tales como inflamación, acidosis, infección y necrosis. El recambio masivo de líquidos y electrolitos origina shock hipovolémico, acidosis y fallo de órganos. La absorción sistémica del agente cáustico es infrecuente dado que el agente químico suele ser neutralizado en contacto con la superficie tisular. 

Resulta infrecuente que tanto los productos ácidos como bases puedan ser absorbidos y producir efectos sistémicos tras importantes ingestiones o extensas quemaduras de piel. (48-49). Los hallazgos más frecuentes son: acidosis metabólica, hipotensión, isquemia miocárdica, fallo hepático y renal (50). Hiperfosfatemia e hipocalcemia pueden ocurrir con la ingestión de ácido fosfórico. Tras la ingestión de ácido clorhídrico la causa más frecuente de muerte es el shock y paro cardíaco. Puede ser frecuente también hemólisis, 
hemoglobinuria, nefrotoxicidad y edema pulmonar (51).