Capítulo 3. 1. Valoración del Abdomen Agudo en Urgencias

12. ESTUDIOS DE LABORATORIO


Las técnicas complementarias solo parecen mejorar en un 10 % la rentabilidad diagnóstica, por tanto se ha de insistir en que sigue siendo la anamnesis y la exploración física las herramientas de más rentabilidad en la valoración del abdomen agudo (2, 6, 7, 11, 14).

Los estudios de laboratorio nos ayudan no solo al diagnóstico sino que en muchos casos al tratamiento del proceso.

Serían innumerables las determinaciones de laboratorio que se pueden realizar, en urgencias y ante una abdomen agudo las de mayor rentabilidad son:

    1. Hemograma con recuento y fórmula leucocitaria.
    2. Determinación de electrolitos, glucosa, BUN y creatinina.
    3. Determinación de amilasa.
    4. Gasometria.
    5. Análisis de orina.
    6. Test de embarazo.
12. 1. HEMOGRAMA

La principal indicación del recuento y fórmula leucocitaria es la diferenciación entre apendicitis aguda y dolor abdominal inespecífico. En este sentido, la leucocitosis acompaña a la apendicitis aguda en la mayoría de los casos, algo menos en colecistitis y aproximadamente en la mitad de casos de obstrucción, frente a gastroenteritis en un 43% y dolor abdominal inespecífico en un 31% (7).

Tener presente que la apendicitis en su inicio puede cursar con fórmulas normales y por otra parte gran variedad de procesos abdominales cursan con leucocitosis; como valor útil se toma 13.000 leucocitos/mm3; a partir de aquí a mayor cifra es más probable que la apendicitis se encuentre complicada, cifras mayores a 20.000/mm3, difícilmente se van a evidenciar fuera del contexto de la peritonitis (16).

Otra determinación del hemograma de suma importancia en la valoración de la patología abdominal es el hematocrito. Pacientes con sospecha de hemorragia puede precisar de determinaciones seriadas cada 20 ó 30 minutos, dado que el hematocrito tarda un tiempo en descender en las hemorragias agudas. Ante un abdomen agudo que presenta caída del hematocrito nunca hemos de olvidar al aneurisma disecante de aorta como posible responsable del cuadro clínico.

Por último otra determinación hematológica importante es el estudio de coagulación, este nos proporciona el diagnóstico y evolución de una posible coagulopatia de consumo, generalmente acompañante de infecciones intrabdominales importantes por gérmenes gramnegativos. Hemos de recordar también que uno de los principales indicadores de insuficiencia hepática es la disminución no recuperable con vitamina K de la actividad de protrombina, así como del fibrinógeno y de otros factores producidos en el hígado.
 

12. 2. BIOQUIMICA

La determinación de electrolitos es obviamente de suma importancia diagnóstica y terapéutica cuando aparecen vómitos o diarrea así como en los casos de acidosis metabólica.

Urea y creatinina informan acerca de la función renal, que puede alterarse por la deshidratación. Puede decirse que en la hemorragia gastrointestinal y en otros procesos que cursen con deshidratación vamos a encontrar un aumento de estas, mientras que sus valores van a estar descendidos en las enfermedades hepáticas.

La importancia de la determinación de la glucemia es debida a que forma parte de la evolución de la cetoacidosis diabética, que es una de las principales causas de abdomen agudo extraabdominal (6, 7). También es de suma importancia como factor pronóstico de la pancreatitis aguda y así mismo puede encontrarse alterada a causa de una severa enfermedad tumoral.

Muy útil es el hallazgo de acidosis metabólica con anión gap en el marco de un abdomen agudo, este hecho orienta hacia sepsis, shock, ingestión de tóxicos, cetoacidosis, fallo renal o patología vascular mesentérica.

La hiperamilasemia aunque no es exclusivo de patología pancreática a medida que el valor aumenta es más probable que se trate de patología pancreática, así valores mayores de 2.000 UI/L raramente están producidos por patología no pancreática, igualmente es importante recordar que una cifra de amilasa normal no excluye la patología pancreática; en este mismo sentido, es conveniente remarcar que el nivel de amilasa no es significativo de un diagnóstico último de pancreatitis (17), incluso su normalidad no descarta la presencia de pancreatitis, incluso grave (16, 17). Existen múltiples patologías que cursan con incrementos de la cifra de amilasa, si bien generalmente en valores intermedios (500-2000 UI/L):

    • Ulcera péptica perforada.
    • Obstrucción del intestino delgado.
    • Trombosis mesenterica.
    • Peritonitis.
    • Hepatitis virica.
    • Embarazo ectópico.
    • Anemia intensa.
    • Toma de opiáceos.
    • Inflamación de glándulas salivares.
12. 3. ANALISIS DE ORINA

Es una de las pruebas que más información nos va a aportar en la valoración de urgencias de un abdomen agudo.

Es necesario que la muestra sea tomada correctamente, para ello desechar la porción inicial y final, obteniendo la muestra del chorro medio y procediendo rápidamente a su procesamiento.

Puede proporcionar información sobre el estado hidroelectrolítico y sobre la capacidad renal de concentración urinaria.

Buscaremos la presencia de productos patológicos:

  • Sangre.
  • Proteinas.
  • Bilirrubina.
  • Células.
  • Reacción positiva a hem: mioglobinuria o hemólisis.
En cualquier caso el hallazgo de signos compatibles con patología urinaria, no puede nunca descartar la necesidad de laparotomia en los pacientes con signos de peritonitis (16).