Triple
H en pacientes con hemorragia subaracnoidea que han
recibido tratamiento endovascular
Artículo
original: Aiyagari V, Cross DW, Deibert E, Dacey RG, Diringer MN.
Safety of Hemodynamic Augmentation in Patients Treated With Guglielmi
Detachable Coils After Acute Aneurysmal Subarachnoid Hemorrhage. Stroke
2001; 32: 1994-1997.
Introducción:
El tratamiento de la hemorragia subaracnoidea aneurismática (HSA) incluye
como medida obligada la corrección de la lesión aneurismática, para
evitar el riesgo de resangrado. El clipaje quirúrgico del aneurisma está siendo
sustituído rápidamente en los últimos años en casos seleccionados por el tratamiento
endovascular mediante la colocación de alambres de platino en su interior
hasta obliterar su luz (Guglielmi Detachable Coils, GDC). En la actualidad
se estudia la efectividad de dicho tratamiento a largo plazo. Por otra
parte, el vasoespasmo complica a menudo los días y semanas siguientes al
sangrado inicial de la HSA, y se trata habitualmente mediante el
"refuerzo hemodinámico" (hipertensión inducida o triple H:
hipervolemia, hipertensión, hemodilución), aunque existen reparos a la
hora de administrar este tratamiento agresivo a pacientes que han recibido
GDC en vez de clipaje quirúrgico, por el peligro potencial de
repermeabilización y posterior ruptura del aneurisma.
Resumen:
Los autores presentan una serie de casos ocurridos durante un periodo de
cuatro años de HSA tratados mediante GDC (51 casos), que presentaron
déficit isquémicos retrasados (DIR) (12 casos, 23%), y que fueron
tratados con una estrategia de refuerzo hemodinámico que incluyó
líquidos, fenilefrina, dopamina y/o dobutamina. Los aneurismas de dichos
pacientes habían sido obliterados en todos los casos en al menos el 80%
de su luz. El tratamiento se
prolongó durante una media de tres días, induciéndose una elevación de
la TA en torno al 15%, sin que se detectasen complicaciones ni resangrados
durante el curso del tratamiento.
Comentario:
Se trata de una pequeña serie de casos sobre una cuestión importante y
poco estudiada. La única alternativa existente al tratamiento con triple
H es la práctica de arteriografía con angioplastia o administración
intraarterial de papaverina, técnicas también consideradas
experimentales y de seguridad no probada en los pacientes tratados con
GDC. El acúmulo de experiencias con cualquiera de estos tratamientos irá
afianzándolos como alternativas terapéuticas, cuya eficacia y seguridad
a corto y largo plazo es necesario investigar cuanto antes en ensayos clínicos
aleatorizados.
Eduardo
Palencia Herrejón
©REMI, http://remi.uninet.edu.
Octubre 2001.
Enlaces:
Palabras clave:
Hemorragia subaracnoidea, Déficit isquémico retrasado, Guglielmi
Detachable Coils, Hipertensión inducida, Tratamiento.
Envía tu comentario para su
publicación |