Capítulo 1. 15. Manejo del paciente en el postperatorio de cirugía cardiaca

9. TRASTORNOS DE CONDUCCIÓN Y BRADIARRITMIAS


Todo paciente postoperado de CEC tiene electrodos directamente situados en el epicardio, lo que permite la estimulación eléctrica cardiaca mediante un generador externo. Estos electrodos estan colocados sobre el ventrículo y muy comunmente sobre la aurícula, siendo útiles no solo para estimular eléctricamente sino para el diagnóstico de determinadas arritmias y trastornos de conducción ya que nos permite conocer la actividad eléctrica auricular y ventricular.

Si bien los trastornos de conducción y arritmias en general son superponibles a las que puede presentar otro tipo de paciente, existen peculiaridades en la etiologia y el tratamiento de las alteraciones del ritmo cardiaco propias del postoperatorio de cirugía cardiaca. En la aparición de las arritmias en el postoperatorio de CEC influyen factores metabolicos y hemodinámicos que deben ser evaluados y corregidos a la vez que se emplean medidas terapeúticas encaminadas al tratamiento directo de la arritmia. Entre estos factores se encuentran las alteraciones electroliticas ya comentadas, la agresión quirúrgica directa sobre el tejido cardiaco y las alteraciones secundarias al daño celular isquémico que se produce en el miocardio durante la CEC.

La evaluación del ritmo cardiaco que presenta el paciente debe realizarse desde el momento en el que llega del quirofano, y se debe utilizar la estimulación electrica siempre que sea necesario, bien por la existencia de algún tipo de bradiarritmia o de trastorno de conducción. Incluso en ausencia de alteraciones patologicas del ritmo cardiaco se debe mantener una frecuencia cardiaca, a ser posible con estimulación auricular, entre 90 y 110 lpm para optimizar la situación hemodinámica. La estimulación eléctrica cardiaca es el "inotrópico" mas sencillo de utilizar, y siempre que se pueda, se utilizara estimulación auricular o secuencial. En la tabla 8 se resumen los trastornos de conducción y bradiarritmias mas frecuentes en el postoperatorio de CEC.

Los trastornos de la conduccion intraventricular, bloqueos de rama y/o hemibloqueos, no requieren tratamiento especial, sino observación y valoración de posible necrosis perioperatoria asociada, sobre todo si éstos son persistentes. En el caso de bloqueos bifasciculares, considerar la posibilidad, en caso de persistencia, de mp definitivo.