Capítulo 9. 8. El paciente quemado grave

2. CLASIFICACION Y ETIOLOGIA

Los agentes causales de las quemaduras son extremadamente variados y se agrupan en tres categorías principales: quemaduras térmicas, quemaduras químicas y quemaduras eléctricas.

Las quemaduras térmicas, las mas frecuentes (> 90 % de los casos), se clasifican en tres subgrupos: a) Quemaduras por contacto, que a su vez pueden ser con un sólido caliente ( en general limitadas aunque profundas) o con un líquido caliente (extensas pero algo menos profundas); b) Quemaduras por llama ( mas o menos extensas, pero casi siempre profundas) que, cuando se producen en espacios cerrados se asocian a menudo a lesiones pulmonares por inhalación de humos o substancias tóxicas producidas en la combustión ( monóxido de carbono, isoniacidas, cianuro, partículas en suspensión, gases a alta temperatura, etc.) y c) Quemaduras por radiación, fundamentalmente por los rayos ultravioleta tras exposiciones solares, también por radiaciones ionizantes.

Las quemaduras químicas se pueden clasificar en: a) Quemaduras por ácidos, generalmente limitadas y de profundidad media siempre que hayan sido precozmente lavadas de forma abundante y b) Quemaduras por bases o álcalis, mas profundas que las producidas por ácidos y generalmente evolutivas.Un caso especial de quemadura química es la producida por ácido fluorhídrico, habitualmente muy profundas y dolorosas, y que requieren un tratamiento específico por quelación del agente causal con gluconato cálcico intralesional, vigilando la aparición de hipocalcemias severas

Las quemaduras eléctricas pueden ser de dos tipos: Quemaduras por flash eléctrico y quemaduras con paso de corriente a traves del cuerpo. En la quemaduras por flash eléctrico, cuando no existe paso de corriente a través del organismo, al producirse un cortocircuito, se producen temperaturas muy altas ( hasta 3000º C) de muy corta duración (milisegundos); la lesión es bastante superficial y afecta a las superficies corporales expuestas (cara, manos, etc...). Es posible en estos casos, la aparición de afectación corneal (queratitis actínica) que requerirá atención específica. En ocasiones se asocia a quemaduras térmicas al prenderse la ropa del accidentado.

Las quemaduras eléctricas con paso de corriente a través del organismo, son lesiones casi siempre muy profundas, en las que el porcentaje de superficie corporal quemada no es indicativo del daño real existente, dado que en los casos severos existen lesiones musculares, óseas, tendinosas, nerviosas y vasculares graves de la extremidad afectada; pueden asociarse a lesiones por electrocución.

Las quemaduras por llama y las escaldaduras por líquidos calientes como se representa en la figura 1 son las mas frecuentes en nuestro entorno geográfico. Las quemaduras afectan a pacientes de cualquier edad. No obstante el mayor riesgo de sufrir quemaduras corresponde a niños, sobre todo menores de 10 años, ocurriendo en el 80 % de estos accidentes infantiles en el domicilio del paciente. En la figura 2 podemos observar la distribución por edades de los pacientes ingresados en la Unidad de Quemados del Hospital Virgen del Rocio a lo largo de tres años. Es de resaltar que a pesar del predominio de quemaduras en la primeras décadas de la vida, se observa la tendencia en los últimos años a incrementarse el porcentaje de pacientes con quemaduras de mas de 70 años, lo cual puede deberse, entre otras razones, al envejecimiento de la población, con inversión de la pirámide de edad. Cuando se analiza la distribución por sexos de los pacientes atendidos en las unidades de quemados se observa un predominio de varones con una relación varones/hembras de 2 a 1. Se observan variaciones estacionales en la incidencia de quemaduras, así, en nuestro medio, son más frecuentes en los meses de invierno y, en menor medida, en verano que en el resto del año (figura 3). Las razones para estas oscilaciones en la incidencia quizás el empleo de métodos de calefacción durante el invierno y los desplazamientos vacacionales durante el verano.

La extensión y profundidad de la quemadura, junto a la edad del paciente, etiología de la quemadura y lesiones asociadas constituyen los principales elementos que determinan la gravedad del paciente con quemaduras. En la tabla 1 se presentan los criterios de gravedad en pacientes quemados según la American Burn Association.