Capítulo 10.3. Intoxicación por Psicofármacos

3. LITI0


El litio es un ion metálico del grupo IA de la tabla periódica al igual que el sodio y el potasio. En Europa ya se prescribía en 1897 para el tratamiento de la depresión. En los EEUU fue utilizado en un principio como sustituto de la sal de venta libre y en algunas bebidas refrescantes en la década de 1940. Posteriormente, la FDA lo aprobó en 1970 como fármaco para el tratamiento de los trastornos maniaco-depresivos. Debido a su bajo índice terapéutico ( 0.8 a 1.2 mEq/L ), con relativa facilidad pueden producirse situaciones de sobredosificación o intoxicación terapéutica. La frecuencia de intoxicaciones voluntarias tambien ha aumentado a lo largo de los años con la creciente disponibilidad del fármaco.

3.1. FARMACOLOGIA Y FARMACOCINETICA

Los iones de litio son absorbidos por completo del tracto gastrointestinal y se alcanzan concentraciones séricas picos despues de 3 a 5 horas de su administración. Su unión a las proteinas séricas es mínima y su volumen de distribución es de 0.9L/Kg; sin embargo, su distribución dentro del compartimento tisular y fuera de él puede tardar hasta 25-30 horas con dosis terapéuticas de los preparados de liberación sostenida y más aún cuando se ingiere una sobredosis del fármaco. El litio no es metabolizado sino que se elimina practicamente por entero por via renal. La vida media inicial es de 6 a 12 horas; de ahí en adelante, a medida que el compartimento tisular libera el fármaco en él almacenado, la vida media se puede prolongar a 24 horas o más. Los túbulos proximal y distal reabsorben alrededor del 80% del litio filtrado y la reabsorción aumenta en forma notoria en los estados de hiponatremia 72.

3.2. CUADRO CLINICO

Las manifestaciones clínicas de la intoxicación por litio varian mucho según los niveles séricos del fármaco, las enfermedades de base del paciente, la ingesta simultánea de otros agentes, el estado de hidratación y la cronicidad de la sobredosis. Los principales efectos clínicos corresponde al SNC, los riñones y el corazón. Los hallazgos neurológicos iniciales consisten en confusión, temblor e hiperrreflexia. Los sintomas pueden progresar hasta delirio, movimientos coreiformes, espasticidad, alucinaciones, coma y convulsiones. Se han documentado alteraciones de la memoria y déficit neurológicos a largo plazo después de la intoxicación por litio. Los pacientes en tratamiento crónico tienen una disminución gradual del indice de filtración glomerular y un defecto de la capacidad de concentración del riñon resistente a la vasopresina. Estas alteraciones producen deshidratación y agravan la intoxicación 73. Se puede observar hipotensión, arritmias y alteraciones electrocardiograficas consistentes en aplanamiento de la onda T, prolongacion del QT y ondas U 74. Tambien se pueden producir náuseas, vómitos y diarrea. Otros efectos secundarios serian vision borrosa, nistagmo, sequedad de boca, hipertermia o hipotermia y debilidad muscular. los pacientes en tratamiento crónico y sobredosis tienen mayor riesgo de complicaciones 73.

3.3. TRATAMIENTO

El tratamiento de una sobredosis aguda de litio comienza con la evacuación gástrica. El carbón activado no absorbe bien el litio y no esta indicado a menos que haya la ingestión simultánea de otros fármacos 72. De hecho, parece que la resina de intercambio sulfonato sodico de poliestireno fija litio y disminuye algo la absorción. Las complicaciones de la administración del sulfonato sódico de poliestireno incluyen la sobrecarga de sodio, hipopotasemia, hipocalcemia, náuseas, vómitos y constipación. El carbonato de litio es una sal de litio poco soluble que puede formar bezoares, la irrigación intestinal total con una solución de lavado de polietilenglicol-electrolitos ha demostrado reducir la absorción de un preparado de litio de liberación lenta.

Una vez el litio es absorbido es importante acelerar su eliminación porque el fármaco no se metaboliza. Se debe administrar suero fisiologico intravenoso o solución salina al 0.45% para mantener una diuresis normal y corregir la deshidratación y la deplección de sodio. La hemodiálisis es el tratamiento de elección, se debe realizar hemodiálisis cuando el nivel sérico pico (por lo menos seis horas despues de la ingestión) es mayor de 3.5 mEq/L o cuando supera los 2.5 mEq/L con síntomas en un paciente con sobredosis crónica. Los pacientes con insuficiencia renal no pueden excretar el litio con normalidad y por lo tanto tambien estaría indicada la hemodiálisis con niveles más bajos. Después de la diálisis se produce un aumento de los niveles de lítio a medida que este se redistribuye y en ocasiones es necesario repetir la hemodiálisis 72