Póster |
Tudela Pallares, J.; *Evole Buselli, M.; **Jarque Ramos, I.; Hernández Martí, M.
Hospital Univ. La Fe. Servicio de Dermatología*, Hematología** y Anatomía Patológica.
Valencia. España
Varón de 50 años que es remitido a nuestro Hospital por presentar astenia progresiva y aftas bucales de dos meses de evolución
A la exploración además de las aftas bucales se observaron múltiples nódulos subcutáneos, no dolorosos, localizados en abdomen, muslos y brazo derecho.
La analítica en el momento de su ingreso mostró Hematocrito 237%; Hemoglobina 8 g/dl. VMC 100 fl; Hematíes 2360000; Leucocitos: 1420 /mm3 (N 85%; L: 838%; M:28%; E:28%; B:18%). plaquetas: 133000 mm3.
La biopsia de uno de los nódulos subcutáneos mostró un infiltrado en el tejido celular subcutáneo, con un patrón mixto: lobulillar y septal. Este infiltrado estaba constituido en su mayor parte por linfocitos de núcleo irregular, hipercromático, de tamaño variable y con pequeño nucleolo. Existían numerosos focos de cariorexis y fenómenos de citofagia. Los linfocitos mostraron un fenotipo T. La biopsia de médula ósea mostró una infiltración difusa por células linfoides T. No se observó hemofagocitosis ni en la biopsia cutánea ni en la de médula ósea. Con técnicas inmunohistoquímicas y de PCR se descartó la presencia del virus de Epstein-Barr. El paciente fue tratado con ciclos de CHOP, desapareciendo los nódulos subcutáneos y la infiltración de la médula ósea.
Los linfomas lipotróficos o subcutáneos son raros. La mayor parte de estos linfomas corresponden a linfomas T. Tan solo se han descrito dos casos de linfomas subcutáneos de células B. Algunos de estos pacientes con linfomas paniculíticos desarrollan pancitopenia que se asocia a la presencia de hemofagocitosis. La presencia de hemofagocitosis es un signo de mal pronóstico. En el presente caso la bicitopenia fue atribuida a la infiltración de la médula ósea.