Capítulo 12.3. Analgesia Epidural 
 
 2. HISTORIA: 

Aunque el uso de la analgesia epidural es relativamente reciente en las Unidades de Medicina Intensiva, se trata de una técnica centenaria, pues la primera descripción de Leonard CORNING data de 1885. Numerosas experiencias posteriores, realizadas fundamentalmente con el anestésico cocaína, tropezaron con las dificultades de alcanzar el espacio epidural con las agujas de que se disponía, y la irregular analgesia conseguida, por lo que fue una técnica utilizada de forma muy restringida por solamente algunos cirujanos, aplicada prácticamente siempre en su modalidad caudal, y estudiada fundamentalmente por SICARD. En 1922, FORRESTIER, que en su Tesis doctoral hacía una enumeración de las ventajas e inconvenientes de la técnica por vía caudal, indicaba que era posible acceder al espacio epidural en toda la extensión de la columna, y no solo caudalmente, y hacía una descripción de la técnica necesaria, que en lo esencial ha sufrido escasas modificaciones posteriormente. Independientemente, el español Fidel Pagés publicaba en 1921, en la Revista Española de Cirugía, una perfecta descripción de la técnica a aplicar en la región lumbar, denominándola por primera vez "anestesia metamérica" y mostraba la eficacia de la novocaína al 2%, por lo que se le tiene por el auténtico introductor del método. Hubo, sin embargo, que esperar casi diez años más a que Dogliotti, sin duda con mayor sentido del marketing que Pagés, difundiera la técnica en revistas europeas y americanas, logrando que a partir de entonces, la anestesia epidural lumbar se denominara "el método de Dogliotti". La anestesia peridural entró pues como método aceptado en el arsenal anestésico, superado con ventaja durante mucho tiempo por la anestesia intraraquídea, más sencilla técnicamente, más utilizada y muy bien protocolizada en cuanto a las dosis necesarias, complicaciones, etc. GUTIERREZ, del Hospital Español de Buenos Aires, aportó la técnica de la "gota pendiente", y finalmente, CURBELLO, en 1947, empleó un fino catéter uretral (que introducía por una aguja especial ideada por TUHOY para realizar anestesias intraraquídeas) para realizar una anestesia epidural con catéter. A partir de entonces, prácticamente las únicas modificaciones han sido la sustitución progresiva de los antiguos anestésicos locales, por otros con mejor perfil terapéutico, o por otras substancias analgésicas, y la disponibilidad de finos catéteres que sustituyen con ventaja a la sonda uretral de CURBELLO 1